Tambores de Otoño de Diana Gabaldon
Cuarto libro de la saga
Los tres primeros libros de la saga me encantaron por lo diferente que me parecían y por el choque cultural y temporal que había entre los dos protagonistas, Claire y Jamie, quienes me tenían completamente fascinada. Y sí, digo tenían porque en este libro me ha faltado algo de lo que tenían los anteriores. Es cierto que Claire lleva ya bastante tiempo viviendo de nuevo en la época de él pero ya no es la mujer que era antes, sé que es más mayor y que tiene otra perspectiva de las cosas, pero ya no se cuestiona tanto las cosas ni lucha para que ciertas cosas sean más justas para ellas. Jamie ha retrocedido, en los primeros libros tenía una mente mucho más abiertas y se veía cómo iba cambiando. ¿Le costaba? Por supuesto, pero intentaba ser un hombre más moderno. Los años sin Claire le han pasado factura y ahora se ve más que en el anterior libro. Pero ya no solo eso, entiendo que esta pareja sea así pero ¿la de Brienna y Roger? Hay muchas cosas que me han puesto muy nerviosa porque me parecían muy machistas y muy de señor del siglo XVIII y no de señor del siglo XX. de todas formas, no todo es malo pues es entretenido ver cómo se van desarrollando ciertos acontecimientos históricos, el agobio porque sabes lo que va a venir pero no puedes pararlo, conocemos a los indios —creo que Gabaldon los ha tratado con el respeto que se merecen—, y vemos cómo Jamie y Claire tratan de construir una casa en un prado para asentarse en norte América. Es una novela entretenida y me ha gustado, aunque hecho mucho de menos a los que eran al principio.
La cruz ardiente de Diana Gabaldon
Quinto libro de la saga
Con el disgustillo del anterior libro, me puse a leer este libro y me quedó claro que tenía que haberme dado un tiempo para seguir. ¿Por qué? Pues ahora os lo explico. Veréis, me pasó un poco como con Tambores de otoño, no dejaba de tener la sensación de que me habían cambiado a mis personajes. Las broncas en los tres primeros libros no se solucionaban tan rápidamente, aquí parece que Claire se ha dado por vencida. Brianna no planta cara a Roger, a pesar de haber venido de la misma época, por lo que no habría el problema de Claire y su marido. Pero este tiene un poco más de miga porque intentan matar a alguien en una boda y hay que averiguar quién es, cosa que no es tan fácil. Además, como siempre, los escoceses tendrán problemillas con las autoridades de la región por ciertas diferencias —que es Outlander sin problemas con soldados, ¿eh? En cuanto a la historia, no hay nada así importante, supongo que se prepararán para la siguiente novela. Sinceramente, de los cinco que llevo leídos este ha sido el que menos me ha gustado, incluso me ha costado engancharme.
A orillas de un mismo recuerdo de Laurie Halse Anderson
Autoconclusivo
De esta mujer yo me leí hace tiempo Frío, que trata sobre la anorexia. Recordaba que me gustó ese libro, así que me decidí a leer su nueva novela y tengo que decir que me ha gustado muchísimo porque me ha parecido muy interesante. A orillas de un mismo recuerdo nos habla de una hija y su padre. Él es un veterano de guerra con problemas psicológicos, fruto de la experiencia en la guerra y ella se dedica a cuidarle, evitando que la gente descubra la situación en la que ambos viven. Me ha gustado mucho porque nunca había leído un libro de este tipo, en el que vamos viendo las consecuencias de la guerra, cómo afecta a sus familias y lo mal atendidos que están. Siempre da la sensación de que el gobierno te abandona una vez vuelves, como si ya no les importaras. Ya les has servido y roto no les vales. Esta es una situación que muchos veteranos denuncian, pues muchos se ven abandonados y algunos hasta acaban viviendo en la calle, consecuencia de no recibir una asistencia sanitaria buena cuando vuelven. Laurie Halse Anderson trata el tema con mucha delicadeza y disfruté mucho leyendo su novela. Estoy deseando leer más novelas suyas.
La mujer del viajero en el tiempo de Audrey Niffenegger
Autoconclusivo
Y después de una novela que me gustó, volvemos a otro disgusto. Llevaba mucho tiempo queriendo leer este libro y cuando en Hijas de Mary Shelley, un club de lectura, salió como libro del mes me hizo mucha ilusión, sobre todo porque al fin salía un libro que yo no había leído. Total, que fui a la biblioteca con toda la ilusión del mundo y lo cogí. La ilusión me duró dos días, que fue el tiempo en el que llegué a la parte en la que empecé a torcer el labio en plan "no no no, por favor no la fastidies que esto iba muy bien". Iba a hacerle una entrada solo para él pero es que no tengo ni ganas, imaginaros con esto lo poco que me ha gustado. Es un despropósito. Podría hablaros de todas las cosas malas que hay en el libro, de la relación terrible entre la protagonista y el viajero, de la poca importancia que se le da a ella —algo incomprensible porque ¿hola? se supone que el libro va de ella—, de que la mayor parte del libro va sobre las idas y venidas de él y de discusiones, de lo mucho que ha desaprovechado los viajes en el tiempo... os podría hablar de muchas cosas, pero quiero hablaros de la relación entre Henry, el viajero, y Clare cuando esta es una niña. El viajero aparece en la vida de ella cuando es una niña pequeña, cambiándole la vida para siempre. Él tendrá unos cuarenta y algo. Ella va creciendo y él la visitará de vez en cuando, pero siempre con una edad de entre treinta y muchos y cuarenta y algo. Os pensaréis que tendrán una amistad y punto, pero no. Os equivocáis. Ella se irá enamorando y cuando es una adolescente empezará una relación romántica con él, un señor que tiene entre treinta y cuarenta años. Veis por donde voy, ¿no? Henry es su novio, aunque le ve en contadas ocasiones, y me parece un despropósito porque ella es una menor y él es un adulto muy adulto. ¿No vio la autora el problema? Vale, cuando mantienen relaciones es cuando ella tiene dieciocho años, pero me importa más bien poco. Además, me da la sensación que la sexualiza desde que es una niña y me parece horrible, por lo que se ganó mi total desprecio este libro. No está bien y no os lo recomiendo en absoluto, además de que la historia es un rollo y se me hizo eterno.
James Potter y la maldición del guardián de G. Norman Lippert
Segunda parte de la saga
En esta novela, Lippert se separa completamente del legado maldito, pues Albus y Scorpius no compartirán casa, él no será el niño adorable que es en la obra de teatro y los acontecimientos no serán los mismos. En lo único que no cambia es que Albus es igual de tonto en ambas historias. ¿Va a haber otro lío en este libro? Por supuesto, vamos a ver, es un Potter, ellos van a donde hay problemas porque les encanta. A parte de los líos en los que se mete James, vamos a ser testigos de sus peleas con Albus —porque es otro idiota— y de sus intentos por protegerle, algo que le va a salir fatal porque eso es otra cosa que a los Potter no les gusta, que les protejan. Además, James va a intentar entrar a Quidditch pero le va a salir un poco mal. ¿Qué es lo curioso? Que en esta novela, Albus se parece más a Harry y, por supuesto, él si entrará. Esta segunda parte me ha gustado pero le veo ciertos fallitos, hay cosas que no me han entusiasmado demasiado y que habría preferido que fueran de otra manera. Los Gremlins seguirán presente y tendrán un papel importante, pues James esta vez les pedirá ayuda un poco antes.
Y eso es todo por hoy. ¿Vosotros habéis leído alguno de estos libros?
Publicar un comentario
Cuéntame lo que te ha parecido, te lo agradeceré inmensamente. Un abrazo enorme.